Su nombre proviene del verbo “machacar” por su preparación original siendo machacada en un molcajete ya que en un comienzo los indígenas totonacas de donde se dice es originaria esta salsa, molían una mezcla de chiles secos, junto con semillas de sésamo y sal, obteniendo así una pasta picante ya con el tiempo la receta fue variando en algunos lugares le agregan aceite, almendras, tortillas doradas y muchas cosas más.
Ahora que ya sabes un poco más de su historia, pongamos manos a la obra:
11 dientes de ajo
4 cucharadas de ajonjolí natural
2 cucharadas de cacahuates sin sal
60 gramos de chile árbol seco
1 taza de aceite de oliva
½ cucharadita de sazonador de pollo
1 tortilla dorada cortada en tiras delgadas
Corta en rebanadas finas los ajos, coloca al fuego una sarten y añade sólo media taza de aceite (y reservar la otra mitad). Cuando esté caliente, fríe con cuidado de que no se quemen los ajos durante un par de segundos sin dejar de mover. Cuando estén listos, retíralos del sartén y deja solo el aceite.
En ese mismo aceite, fríe los chiles de árbol durante unos 15 segundos sin dejar de mover, escurre y colócalos dentro de la licuadora junto con el ajo frito.
Vuelve a calentar el mismo sartén con el aceite donde freíste los ajos junto con los chiles y cuando esté nuevamente caliente, fríe los cacahuates durante unos 30 segundos sin dejar de mover sácalos con cuidado, escúrrelos bien y ponlos junto con los chiles, los ajos.
Apaga el fuego y antes de que pierda el calor tuesta el ajonjolí durante unos 10 segundos sin dejar de mover para evitar que se queme. Cuando esté listo, retíralo del sartén y juntalo con el resto de ingredientes.
Colocar esta mezcla de ingredientes fritos y tostados en la licuadora o el procesador de alimentos. Agregar el Caldo De pollo. Muele o tritura durante unos 5 segundos procurando que la salsa te quede con trozos de chile y cacahuate, añade la tortilla doradita y mezcla.
¡Listo! Ahora puedes disfrutar de esta picosa salcita que además por el aceite te va a durar mucho tiempo.