Dedicar 15 minutos a planear tu semana puede reducir significativamente el estrés diario. No se trata de llenar una agenda, sino de identificar prioridades reales, tiempos disponibles y posibles obstáculos. Al hacerlo, tu cerebro deja de vivir en “modo reacción” y pasa a “modo intención”, lo que mejora la toma de decisiones y la sensación de control.
Este breve espacio de planificación ayuda a anticipar cargas de trabajo y a distribuir mejor la energía. También evita la saturación mental que aparece cuando todo parece urgente. Con el tiempo, este hábito crea semanas más equilibradas y menos caóticas, sin necesidad de estructuras rígidas.
Planear no es controlar todo; es saber por dónde empezar.
– Por Paco Corral
Nos vemos en Giros Puebla de lunes a viernes, de 11 am a 1 pm
