Pasar largas horas sentado puede tener consecuencias más graves de lo que parece. Diversos estudios han relacionado el sedentarismo con problemas de espalda, obesidad e incluso enfermedades cardíacas. Por eso, en los últimos años se ha popularizado el uso de escritorios ajustables para trabajar de pie durante parte del día.
Estar de pie ayuda a mejorar la circulación, la postura y la energía mental. No se trata de pasar toda la jornada sin sentarte, sino de alternar posiciones: 25 minutos sentado, 15 de pie. Si no tienes un escritorio especial, puedes improvisar colocando tu laptop sobre una superficie elevada.
Con el tiempo, este hábito puede reducir dolores musculares y aumentar la concentración. Es una pequeña inversión que trae grandes beneficios para tu cuerpo y productividad.
– Por Paco Corral
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