Entre las tradiciones más comunes para cerrar el año está barrer la casa y desechar objetos viejos antes de la medianoche. Según especialistas en cultura popular, este acto simboliza dejar atrás lo negativo y abrir espacio a nuevas oportunidades.
Instituciones dedicadas al estudio de las tradiciones mexicanas señalan que este ritual también tiene un impacto práctico, al fomentar el orden y la limpieza como parte de un nuevo comienzo, lo que refuerza su permanencia en los hogares.
