Nueva York es tan rematadamente grande que lo lógico sería que la noticia de la apertura de dos cafeterías pasase sin pena ni gloria. Al fin y al cabo la ciudad que nunca duerme está minada de locales en los que uno puede saborear (o recoger) un latte, capuchino, macchiato o cualquier otra variación de café que se le pase por la cabeza. El estreno de las dos primeras tiendas de Luckin Coffee hace unos meses en la Gran Manzana se coló sin embargo en medios como la CNN o The New York Times y ha inspirado análisis de todo tipo fuera del país.
Lógico. Al fin y al cabo en solo unos años Luckin Coffee ha logrado doblarle el pulso a Starbucks en China. Ahora, para su desembarco en Nueva York, ha escogido un local situado a escasos 60 metros de una de sus cafeterías.
¿Qué es Luckin Coffee? Si su nombre no te suena, tranquilo, es más que comprensible: Luckin es una cadena de cafeterías fundada en 2017 en China por Jenny Qian y Charles Lu y desde entonces su expansión se ha centrado sobre todo en el gigante asiático. En 2023 logró un hito clave al superar a Starbucks como la mayor marca de cafeterías de China y en los últimos años no ha parado de crecer: de las cerca de 16.200 tiendas que tenía ese año en China (más del doble que su rival estadounidense) ha pasado a gestionar más de 20.000 en varios países.
En julio la compañía hablaba de 24.097 puntos de venta repartidos por China continental, Hong Kong, Singapur y Malasia. Solo durante el primer trimestre de 2025 puso en marcha 1.757. Tras hacerse con el mercado chino, hace unos meses la empresa anunció su desembarco en América con dos tiendas en Manhattan y Washington Square Park, una zona muy concurrida por estudiantes. “Esto es solo el comienzo. Nueva York, ya estamos aquí”, advertía Luckin en redes.
¿Tan importante es? El aterrizaje de Luckin Coffe en el mercado estadounidense ha generado expectación dentro y fuera del país. Normal. Su sorpasso a Starbucks en China en 2023 (tanto en ventas como en número de tiendas) tuvo un valor simbólico que va mucho más allá de las cifras.
Para empezar porque el gigante asiático es uno de los grandes mercados de la multinacional estadounidense. Starbucks lleva tiempo además implantada en el país: abrió su primer establecimiento en Pekín en 1999, contribuyendo en gran medida a fijar la cultura cafetera en una nación que tradicionalmente ha optado por el té. De ahí que el salto de Luckin a EEUU haya generado tanto interés.
