La deshidratación es el mejor sistema de conservar los alimentos, consiste en extraer solamente el agua, mediante calor suave que no altera los nutrientes, esta técnica no solo es útil para alargar la vida de los alimentos sino también facilita el almacenaje, transporte y manipulación de los productos.
Esta técnica es promovida por una empresa que recientemente firmó un convenio de colaboración con la escuela de Sistemas Alimentarios de la UNACH, que pretende con la deshidratación de los productos primarios, darle un valor agregado a lo que se cultiva en la región y ofertarles a los campesinos mayores ganancias.
El empresario Alejandro España expuso que, la deshidratación es una herramienta útil para revalorizar las cosechas del campo mexicano, ya que debido a los bajos precios que les pagan por sus cultivos, muchos campesinos las regalan o incluso las dejan perder y si ellos deshidratan sus cultivos y mantienen la calidad de sus nutrientes, podrían vender sus productos hasta al triple de su valor y exportarlos.
Ya con la firma de convenio de colaboración con la Universidad Autónoma de Chiapas, Alejandro España, indicó que la intención es ayudar a obtener una economía circular para darle un valor agregado a los cultivos, donde el principal beneficiado sea el productor, al obtener más ganancias por sus cultivos.
La mayoría de las personas acostumbra consumir productos frescos y tienen la percepción errónea de que un producto deshidratado es de mala calidad; sin embargo, cuando a éste se le agrega agua vuelve a su volumen original con la mayoría de sus propiedades intactas; como ejemplo, en Michoacán trabajan la técnica de deshidratado y los productos alargan la vida de consumo y abaratan costos de transporte.
Alejandro España mencionó que, al establecer esa tecnología en el campo mexicano, se podrá reivindicar y reconocer la labor de los productores que son el sustento de la cadena alimenticia, pero son los que menos ganan en todo el proceso, pues hacen el 90 % del trabajo y sólo reciben el 10 % de las ganancias.
