Venezuela anunció la salida de un buque cargado con crudo en medio de tensiones con Estados Unidos, que mantiene sanciones contra el sector energético del país sudamericano.
La acción fue interpretada como un desafío a las restricciones impuestas por Washington, intensificando el conflicto diplomático y económico entre ambas naciones.
El gobierno venezolano aseguró que defenderá su postura en instancias internacionales, mientras el tema energético vuelve a colocarse en el centro del debate global.
