La presión tecnológica crece y un nuevo análisis internacional advierte que sectores completos podrían transformarse en cuestión de meses, ya que la inteligencia artificial acelera su avance y desplaza tareas que antes solo realizaba personal especializado. El informe señala que 2026 será un año clave para medir el impacto real en la estabilidad laboral.
Los puestos más expuestos son aquellos centrados en procesos repetitivos o altamente sistematizados: asistentes administrativos, operadores de centros de llamadas, capturistas de datos, personal de soporte técnico básico y trabajadores de almacén, todos entre los más vulnerables debido a la automatización. El estudio recalca que dichas funciones ya están siendo absorbidas por sistemas de IA capaces de ejecutar operaciones a alta velocidad y con bajos costos.
Aun así, especialistas aseguran que la desaparición total de empleos no es inmediata: profesiones que requieren creatividad, contacto humano, toma de decisiones complejas y habilidades manuales continúan siendo difíciles de sustituir. El reto principal será que los trabajadores actualicen sus capacidades para integrarse a los nuevos modelos laborales dominados por herramientas inteligentes.