Con la llegada de la temporada de Día de Muertos, los mercados de la capital oaxaqueña ya lucen llenos del característico aroma del pan de muerto, uno de los productos más esperados por las familias para colocar en las ofrendas o disfrutar en casa.
Comerciantes y panaderos informaron que, pese a que se preveía un incremento en los precios derivado del alza en algunos insumos como la harina, el azúcar y la mantequilla, hasta el momento los costos se mantienen estables respecto al año anterior.
Los vendedores señalaron que el precio varía según el tamaño y el tipo de pan, pero en general se ha procurado mantenerlos accesibles para no afectar las ventas ni el bolsillo de los consumidores. “Decidimos no subir los precios para que la gente pueda seguir comprando, porque es una tradición que no puede faltar”, expresaron algunos locatarios.
Se espera que en los próximos días, conforme se acerquen las fechas principales de la celebración, la demanda aumente considerablemente, especialmente en los mercados 20 de Noviembre, de la Merced y Sánchez Pascuas, donde el pan de muerto ocupa un lugar especial entre las tradiciones oaxaqueñas.
