El gobernador de Oaxaca Salomón Jara Cruz señaló a sus antecesores —Ulises Ruiz, Gabino Cué y Alejandro Murat— de haber desviado más de 34 mil millones de pesos destinados a obras públicas que no se ejecutaron y los cuales quedaron como deuda pública.
Sobre todo porque omitieron el pago de impuestos al SAT, Fovissste y retuvieron recursos destinados a prestaciones de trabajadores.
“Ulises Ruiz dejó una deuda de más de 5 mil millones; luego Gabino Cué la elevó a 18 mil millones, y finalmente Murat la dejó en 34 mil millones, sin contar los adeudos al SAT y al FOVISSSTE. En total, recibimos compromisos con acreedores por 34 mil millones de pesos”.
Durante su ejercicio de rendición de cuentas ante autoridades municipales de la Sierra Norte, el mandatario explicó que hubiese querido avanzar más en el desarrollo del estado; sin embargo, al asumir el cargo se encontró con una deuda “casi impagable” superior a los 34 mil millones de pesos.
Aseguró que en tres años su administración ha liquidado 14 mil millones de pesos de ese monto y ha saneado las finanzas públicas mediante políticas de austeridad.
Jara sostuvo que, pese a las limitaciones financieras heredadas, su gobierno ha logrado transformar Oaxaca y garantizó que mantendrá un manejo honesto del gasto. Aseguró que, al concluir su mandato, permanecerá en el estado e incluso regresará a su comunidad de origen San Melchor Betaza
“ aquí estaré, en mi casa. No me voy a ir ni a comprar casas en Miami, Nueva York o Italia, como los exgobernadores que se clavaron el dinero del pueblo”.