El Banco de México anunció la reducción de su tasa clave de interés a 7.25 % en un contexto de desaceleración económica, baja inflación y estrechez financiera en sectores clave del país. 
La medida busca incentivar el consumo y la inversión privada, aunque los analistas advierten que la minoría que disintió en el consejo central del banco ve riesgos inflacionarios subyacentes y una economía todavía frágil, por lo que se mantiene prudente ante nuevas reducciones. 
