Wendy Vega | El Sol de México
Con los avances de la inteligencia artificial la ciberdelincuencia ha encontrado una nueva modalidad para estafar a usuarios de Gmail, fingiendo una falla en la seguridad de su cuenta para guiarlos con unos falsos agentes de soporte de la plataforma.
Y es que ahora los delincuentes ya no se conforman con solicitar depósitos o transferencias bancarías, así que buscan la sustracción de datos personales para robar la identidad de las personas y hacer mal uso de ella.
Todo inicia con un correo aparentemente inofensivo que reporta irregularidades en el soporte de la cuenta o una promoción para el usuario.
Al momento en que la IA analiza la información del correo electrónico, su sistema genera un resumen y una alerta para el usuario donde le indica que su cuenta ha sido comprometida e incluso su contraseña fue filtrada, por lo que con base en el texto analizado, proporciona un número de teléfono para comunicarse con “soporte técnico”.
El número al que se contactan los usuarios pertenece a los estafadores que mandaron el correo electrónico, mismos que se hacen pasar por soporte técnico y le solicitan a los titulares de la cuenta datos como contraseñas, códigos de verificación o información bancaria, supuestamente para corroborar su identidad.
Ante esta nueva estafa, Google ha recordado a sus usuarios que no compartan contraseñas ni información sensible a través de correo electrónico ni llamada telefónica, así como reportar todos los correos o mensajes sospechosos que lleguen a sus cuentas.
En caso de que tengas dudas sobre cómo actuar en estos casos, aquí te dejamos unos pasos que puedes seguir y evitar ser estafado.
No abrir correos extraños ni dar click en enlaces de servicio que no solicitaste: esto es una manera de prevenir el robo de tu información, ya que al ingresar a correos que son fraudulentos el sistema puede actuar como se menciona en la “estafa invisible”
No dar correos o contraseñas a externos: recordemos que el soporte técnico de Google no solicita datos personales para dar una consulta de seguridad
Revisar el remitente y dirección de la que proviene el correo: si el correo proviene de una institución, la dirección de email tiene que coincidir con, en caso de que sean distintas se debe desconfiar del contenido de este correo
No descargar contenido o entrar a enlaces sospechosos: algunas veces los archivos pueden contener virus que facilitan el robo de la información de los usuarios, por lo que se debe evitar descargar contenido sospechoso de estos correos