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El Museo de Arte Carrillo Gil presenta dos exposiciones cuyo eje común es el cuerpo

La artista detalló que su obra funciona con placas amarillas de acrílico que se iluminan durante el día y la noche.

La exposición El aire en forma de huésped, de Cecilia Miranda Gómez, y el proyecto Nadie creerá el incendio si el humo no da señales continúan en el Museo de Arte Carrillo Gil (MACG), recinto del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).

Integrada por cinco placas que, como radiografías, reproducen la imagen de las esporas —la unidad mínima del pulmón—, la instalación El aire en forma de huésped, de la artista Cecilia Miranda Gómez, ofrece una reflexión sobre la respiración.

Esta pieza forma parte de la investigación que Miranda Gómez desarrolla en torno a la enfermedad y los efectos que tiene en las personas cuidadoras:
“Mi madre es una paciente oncológica, lo cual me llevó a entender que uno de los lugares que ocupan las personas cuidadoras es el de ser traductoras, y yo entiendo mi trabajo artístico de esa manera. Como cuidadora y artista tuve que traducir términos médicos e investigar y entender cómo funciona nuestro propio cuerpo, lo cual me llevó a interesarme en la respiración”.

La artista detalló que su obra funciona con placas amarillas de acrílico que se iluminan durante el día y la noche, lo cual convierte a la terraza del Museo de Arte Carrillo Gil en los pulmones del recinto. La imagenología es la rama de la medicina a través de la cual se obtienen imágenes del interior del cuerpo: “Las imágenes del pulmón son parecidas a las que yo presento: nebulosas, como si fueran estelas”.

Explicó que su obra invita a reflexionar sobre cómo respiramos: “A partir del hecho de que el aire no lo podemos ver y que sólo lo podemos imaginar gracias a cómo reacciona con algo que lo toca, como cuando se hinchan nuestros pulmones al momento de respirar, la obra invita a ver el aire. Las mamparas están inspiradas en el mobiliario de hospitales públicos y se mueven por efecto del aire e iluminan gracias a la luz solar, por lo que dibujan el movimiento de la espora en nuestros pulmones”.

Añadió que, inspirada en la medicina contrastada de la imagenología —con la que los doctores detectan presencias invasivas en el cuerpo a través de químicos—, se realizan activaciones con las que se crean vitrales efímeros a partir de la intervención de los visitantes.

Cuerpos en movimiento

Nadie creerá el incendio si el humo no da señales. Archivo vivo de cuerpos en protesta y disputas simbólicas en Latinoamérica es un proyecto expositivo curado por Javier Zugarazo y la revista Chiquilla te quiero, que reúne seis casos de movilizaciones en México, Guatemala, Nicaragua, Bolivia, Chile y Argentina.

A partir del mapeo de expresiones artísticas y culturales que ha realizado Chiquilla te quiero, las cuales documentan conflictos políticos y sociales contemporáneos en estos seis países, esta exposición se convierte en un archivero expandido que puede visitarse en la librería del museo.

Desde el proceso constituyente chileno; la reflexión y los movimientos descolonizadores de las cholas en Bolivia; las protestas afectivas y políticas argentinas con proyección continental; las víctimas de violencia estatal nicaragüense; el paro nacional guatemalteco en contra del intento de frenar la toma de posesión de Bernardo Arévalo, y una reflexión sobre las caravanas migrantes en México, la exposición muestra y reflexiona sobre algunas de las acciones artísticas y políticas realizadas en dichos contextos.

Cada caso se exhibe con registro visual y un fanzine, realizados en coordinación con los colectivos participantes: “El objetivo es que haya una reflexión sobre cómo los movimientos de protesta utilizan diversas estrategias. No sólo es el cuerpo en la calle, sino el cuerpo haciéndose visible y disputando el poder simbólico del Estado”, puntualizó el curador.

La instalación El aire en forma de huésped y el proyecto Nadie creerá el incendio si el humo no da señales pueden visitarse de martes a domingo, de 10:00 am a 6:00 pm, en el Museo de Arte Carrillo Gil, ubicado en avenida Revolución 1608, colonia San Ángel, alcaldía Álvaro Obregón, Ciudad de México