El huracán Melissa, catalogado como la tormenta del siglo, ha dejado a su paso una estela de destrucción y al menos 30 personas fallecidas en el Caribe, entre ellas 10 niños, según informaron las autoridades de Haití.
Haití es el país más afectado, con 23 víctimas mortales y una decena de desaparecidos, mientras que Jamaica y Panamá reportan tres fallecidos cada uno, y República Dominicana, uno. Las intensas lluvias y los vientos huracanados provocaron inundaciones, derrumbes y daños severos en viviendas e infraestructura.
Melissa, considerada el huracán más poderoso en los últimos 90 años, según datos de la NOAA, causó en Jamaica la demolición de una iglesia, techos arrancados, ventanas rotas, carreteras bloqueadas y líneas eléctricas colapsadas, dejando al 70% del país sin energía.
Tras azotar Jamaica, el ciclón se desplazó hacia Cuba, donde el presidente Miguel Díaz-Canel describió la madrugada como “muy compleja” y con daños cuantiosos. Las autoridades evacuaron a más de 735 mil personas en las provincias de Santiago de Cuba, Holguín y Guantánamo, como medida preventiva ante el impacto del fenómeno.
De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, Melissa ha perdido algo de fuerza, pero continúa su desplazamiento sobre el Atlántico con vientos sostenidos de 155 kilómetros por hora. Este miércoles por la tarde se encontraba a 175 kilómetros del centro de las Bahamas, donde se espera su llegada durante la noche, manteniendo en alerta máxima a todo el archipiélago.
