El Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) señaló que “dejó atrás las casas mal planeadas y sin servicios”, ahora, las viviendas que construye tienen al menos 60 metros cuadrados, están cerca de los centros de trabajo, cuentan con servicios básicos y áreas verdes.
En una tarjeta informativa, indicó que como parte del programa vivienda para el bienestar, las edificaciones están “bien ubicadas, son dignas y accesibles”. Destacó que el costo promedio es de 600 mil pesos, por debajo del precio del mercado para que sean asequibles a la población y puedan ser adquiridas con el crédito del Infonavit.
Subrayó que para poder acceder a ellas se deben cumplir tres condiciones: ganar entre uno y dos salarios mínimos, no tener un préstamo hipotecario con el Instituto y tener al menos seis meses de antigüedad en el lugar de trabajo.
El objetivo del programa, que comenzó la entrega de viviendas desde octubre pasado, es reducir el rezago habitacional derivado de la falta de oferta para quienes tienen menores ingresos, sostuvo el documento.
De igual manera, señaló que había trabajadores que llevaban más de 25 años con una deuda que no podían pagar a pesar de realizar el pago de sus mensualidades de forma regular.
Por último, Romero se comprometió a que, al finalizar este año, cualquier derechohabiente que presente la misma problemática podrá consultar en el portal de Internet del Infonavit, ya sea con el nombre, número de seguridad social o de crédito, cómo fue restructurado su crédito y los beneficios que obtuvo.