En Chiapas, el ortoprotesista David Ruiz, ha dedicado su vida a fabricar prótesis que cambian la historia de niños y adultos que han perdido una extremidad. Desde su taller en Tuxtla Gutiérrez, él y su equipo trabajan con precisión y sensibilidad, creando piezas que no solo reemplazan un miembro, sino que devuelven movilidad, independencia y confianza a quienes las usan.
El especialista explicó que cada prótesis se diseña de forma personalizada, tomando en cuenta el tipo de amputación, peso, edad y nivel de actividad del paciente. Utilizan materiales de alta resistencia y ligereza, como fibra de carbono, titanio y grafito, así como polímeros especiales para los más pequeños. Estas innovaciones permiten que incluso los niños con amputaciones puedan caminar, correr o jugar como cualquier otro.
Ruiz Escobar destacó también el trabajo que realiza con pacientes diabéticos, quienes requieren una atención más prolongada y un proceso de adaptación cuidadoso. Además el especialista recalca que las terapias preprotésicas y de rehabilitación son importantes para garantizar que las prótesis no causen lesiones y se ajusten de manera óptima.
David y su equipo frecuentemente apoyan a personas de escasos recursos e incluso realizan rifas o campañas para costear prótesis. Él afirma que más allá del negocio, es una misión de vida; ayudar a otros a ponerse de pie otra vez.
