Este 1 de octubre, más que una celebración, el Día Internacional del Café se convierte en una oportunidad para reflexionar sobre la realidad de miles de familias productoras en Chiapas, el estado líder en producción de café a nivel nacional y referente global en café orgánico.
En la actualidad, más de tres millones de personas en la región dependen de este cultivo, cuya estabilidad se enfrenta a constantes desafíos, principalmente el impacto del cambio climático y enfermedades como la roya, que continúa afectando incluso a variedades consideradas resistentes.
En este contexto, productores y asesores del sector enfatizan la importancia de cambiar la narrativa del “festejo” por una de “conciencia”, subrayando el valor del consumo responsable y directo del café chiapaneco.
El llamado en este día es a consumir café natural, sin intermediarios, como un acto de apoyo a las familias que luchan día a día por mantener viva esta tradición.
