El Cacao Mocaya del Soconusco continúa su legado con un nuevo envío de 20 toneladas a Bélgica, reafirmando su compromiso con la sostenibilidad y la calidad.
Este cacao orgánico, cultivado en sistemas agroforestales certificados, demuestra que es posible producir y conservar el medio ambiente, explicó, Jorge Aguilar Reina, representante del Centro Agroecológico San Francisco de Asís.
“Desde hace 30 años, hemos impulsado técnicas de fermentación que aportan precursores de aroma, muy valorados en la industria del chocolate fino. Europa consume la mitad del cacao mundial, y el Mocaya se destaca por su calidad y diversidad de sabores.”
Jorge Aguilar Reina / Asesor Comercial de grupo CASFA
Países como Holanda, España, Francia y Bélgica, adquieren el cacao del Soconusco y lo distribuyen como alimento en más países del viejo continente. El cacao del Soconusco se cultiva en sistema agroforestal sin manipulación genética, lo que contribuye a su singularidad. Este método permite que más de 50 especies nativas coexistan, enriqueciendo el perfil de sabor del cacao.”
“Lo que ofrecemos no es solo un producto, es un alimento. En Francia, existen 4,000 boutiques de chocolate que aprecian la calidad del cacao del Soconusco. Hemos pasado de dos marcas a 15 en solo unos años.”
Durante el 2025 se enviaron alrededor de 120 toneladas a países de Europa. El Grupo Casfa trabaja arduamente para crear una marca colectiva que identifique y diferencie su cacao de otros genéticamente distintos, apoyando así a pequeños productores en la región.
“Este esfuerzo beneficia la economía familiar de los productores. Desde 2006, hemos mantenido envíos regulares a Europa, promoviendo un modelo de agroecología que respeta el medio ambiente.”
La creciente demanda del cacao de calidad ha llevado a un aumento en el consumo nacional, a medida que los consumidores buscan chocolates menos procesados y más auténticos.
Con cada envío a Europa, el Cacao Mocaya del Soconusco no solo está presente en el mercado internacional, sino que también impulsa la economía local y promueve prácticas sostenibles. Un claro ejemplo de que es posible producir y conservar.