“¡Ni un niño más!” y “¡Los niños no se tocan!” fueron algunas de las consignas que retumbaron este domingo en las calles de León, donde más de un centenar de personas marcharon para exigir justicia por el homicidio del pequeño Mateo Santiago.
Vestidos con playeras blancas y negras y portando globos del mismo color, familiares, amigos y ciudadanos se reunieron en el Forum Cultural y caminaron hasta la Presidencia Municipal, liderados por los padres y hermanos del menor. Durante el recorrido colgaron lonas y pidieron a los automovilistas detenerse para escuchar su llamado.
La principal exigencia de la familia es evitar que el acusado, Christian “N”, acceda a un juicio abreviado, lo que reduciría considerablemente la sentencia en su contra. “No queremos acuerdos ni beneficios, queremos justicia total para Mateo”, expresó el abogado de la familia, Óscar Mena.
Mena explicó que la audiencia intermedia se realizará el 23 de octubre, fecha en la que se decidirá si el proceso continúa de manera ordinaria o se acepta el juicio abreviado. La familia pide que se aplique la pena máxima, que podría superar los 100 años por los delitos de violación y homicidio.
El pasado 18 de octubre, Mateo habría cumplido 13 años. Su familia lo recordó con flores, globos y música frente a su tumba, reafirmando su compromiso de no detenerse hasta ver justicia. “Hoy Mateo es la voz de muchos niños que ya no pueden hablar”, expresó su madre entre lágrimas.