Tras semanas de incertidumbre, autoridades confirma que los restos humanos localizados el 23 de septiembre entre las comunidades de San José el Nuevo y Rincón de Tamayo corresponden al agente de Tránsito Juan Antonio Medina Juárez, quien había sido secuestrado el pasado 26 de agosto.
El agente, con más de tres décadas de servicio, fue privado de la libertad cuando llegaba a su domicilio en la colonia Hacienda Natura. Sujetos armados que viajaban en un vehículo color plata lo interceptaron, lo golpearon y se lo llevaron sin dejar rastro.
Casi un mes después, habitantes de la zona encontraron una cabeza humana semienterrada en una parcela y dieron aviso al 911. Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal, Guardia Nacional, peritos de la Fiscalía y bomberos, quienes realizaron la excavación para recuperar el cuerpo completo.
Los indicios iniciales, como un tatuaje visible en el brazo, hicieron sospechar que se trataba del agente desaparecido, pero la confirmación oficial llegó hasta este fin de semana, luego de que las pruebas de ADN realizadas a sus familiares resultaron positivas.
Con esta identificación se cierra una búsqueda de más de cuatro semanas, aunque las investigaciones continúan para dar con los responsables del secuestro y homicidio del agente, conocido entre sus compañeros como “La Peque”.