En beneficio de los trabajadores, en la mañanera de este miércoles se informó que la semana laboral se reducirá a 40 horas de manera paulatina. La presidenta Claudia Sheinbaum resaltó el trabajo que hizo el gobierno de mano de la iniciativa privada.
“¿Cómo vas acordando desde los trabajadores que te dicen queremos 40 horas en el 2026 y empresarios que te dicen, no, no queremos 40 horas, queremos que se queden 48 porque va a afectar la economía de nuestras empresas? particularmente incluso las pequeñas empresas, que es a quien puede incluso llegar a tener mayores problemas, pero en esta gradualidad pues se puede hacer”.
Se prevé que esta reforma beneficie a más de 13 millones de trabajadores, además, no se consideran reducción de sueldos ni salarios o prestaciones. La iniciativa sería aprobada en el próximo periodo de sesiones del congreso para entrar en vigor en mayo de 2026, aunque la reducción sería paulatina empezando con 46 horas para 2027, 44 en 2028, 42 en 20228 y para enero de 2030 llegar a las 40.
Esta ley contempla que los centros de trabajo tengan un registro electrónico de la jornada laboral para verificar el cumplimiento y en cuanto a horas extras, se puede extender la jornada de manera voluntaria.
“Se establece un límite para que la suma entre las horas ordinarias de trabajo y las extraordinarias no puedan superar en ninguno de los casos las 12 horas en un día. En concordancia con la anterior, y tal como se contempla actualmente en la ley, el tiempo de trabajo podrá prolongarse de manera extraordinaria siempre y cuando el trabajador o la trabajadora de manera voluntaria accedan a ello. El trabajar horas extras siempre será una decisión de las y los trabajadores como lo ha sido a la fecha”, explicó Marath Bolaños, secretario del Trabajo.
En la presentación estuvieron los dirigentes de las cámaras empresariales del país, encabezados por Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial.
“Gobierno, trabajadores y empresas siempre hemos mostrado una especial apertura para negociar condiciones que favorezcan a los distintos grupos de población, en especial a los grupos más vulnerables”.
“Este tipo de acuerdos son el resultado y de importantes esfuerzos que hemos desarrollado en los años recientes para enriquecer el diálogo social en nuestro país y mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras a lo largo del territorio nacional. El arreglo al que tenemos que llegar en el corto y mediano plazo, debería ser factible la generación de empleos formales y productivos del 2026 en adelante y mantener un entorno propicio para la sostenibilidad y crecimiento de las empresas”.
La iniciativa fue enviada a la Cámara de Senadores.