Una fuerte tormenta de nieve sorprendió este fin de semana a casi mil personas en el Monte Everest, dejando a cientos atrapados en condiciones extremas. La emergencia comenzó el viernes, cuando el mal clima azotó la región del Tíbet. Aunque el acceso fue cerrado de inmediato, más de 900 personas ya se encontraban en la montaña.
Los equipos de rescate han trabajado sin descanso, enfrentando temperaturas bajo cero y condiciones adversas en altitudes extremas. El grupo Blue Sky Rescue del Tíbet informó que ha logrado salvar a 350 personas, pero aún quedan muchas más bajo la nieve, esperando ser rescatadas.
La creciente popularidad del turismo de aventura en el Everest ha elevado el riesgo de este tipo de emergencias. Por ello, Nepal ha comenzado a aplicar nuevas regulaciones, incluyendo la reducción de permisos de ascenso, con el fin de prevenir tragedias como esta.