En una noche intensa en el Circuito de Yas Marina, Lando Norris aseguró su primer campeonato mundial de Fórmula 1 tras una carrera llena de tensión y maniobras decisivas. El piloto británico de 26 años, originario de Somerset, necesitaba subir al podio para coronarse. Finalmente terminó tercero, detrás de Max Verstappen y Oscar Piastri, resultado que le permitió mantener apenas dos puntos de ventaja sobre el neerlandés. Aunque Verstappen protagonizó una remontada contundente, no logró recortar la diferencia necesaria. Piastri cerró la temporada a trece puntos de su compañero en McLaren, con un rendimiento sólido que reforzó el dominio del equipo en las últimas fechas.
¿Qué momentos marcaron la carrera?
Norris comenzó desde la segunda posición, pero perdió un lugar en la primera vuelta cuando Piastri ejecutó una maniobra arriesgada por la parte exterior de la curva nueve. A partir de ese instante, la carrera se convirtió en una prueba de resistencia y enfoque. Norris administró la presión y neutralizó el ataque temprano de Charles Leclerc, quien intentó adelantarlo en las primeras vueltas. Después avanzó con determinación en el mediocampo, donde realizó varios rebases limpios y estratégicos.
Uno de los episodios más comentados ocurrió durante su duelo con Yuki Tsunoda, piloto de Red Bull y compañero de Verstappen. El japonés se movió de forma irregular en la recta, lo que obligó a Norris a salirse momentáneamente de la pista. Dirección de carrera abrió una investigación y Tsunoda recibió una sanción de cinco segundos, incidente que permitió que Norris retomara el control sin comprometer su objetivo.
Con el paso de las vueltas, la estrategia se volvió fundamental. Piastri lideró brevemente antes de detenerse en boxes a dieciséis giros del final. Norris ingresó una vuelta antes para cambiar a neumáticos nuevos, lo que le permitió consolidar su permanencia en el podio. Aunque Leclerc presionó en los últimos minutos, no logró reducir lo suficiente la distancia. Norris vio la bandera a cuadros con 6.7 segundos de ventaja sobre el piloto de Ferrari.
¿Qué significado tuvo la victoria para Norris?
La tensión se reflejó incluso fuera de la pista. Cisca, madre de Norris, siguió la carrera desde el fondo del garaje de McLaren, incapaz de disimular la emoción durante las últimas vueltas. El británico cruzó la meta consciente de que el tercer lugar era suficiente para convertirse en el undécimo campeón mundial británico en la historia de la F1.
“¡Sí, lo logramos!” exclamó Norris por la radio. El piloto agradeció emocionado al equipo, celebró el trabajo conjunto durante la temporada y dedicó el campeonato a su familia. Con este resultado, la campaña concluyó con una jornada histórica para McLaren y para el nuevo monarca del automovilismo. (Cadena Política)