En esta temporada navideña, las velas vuelven a cobrar protagonismo como elementos clave para crear ambientes cálidos, elegantes y llenos de intención. Más allá de iluminar, estos accesorios se han convertido en piezas decorativas que combinan estética con simbolismo, pues cada color está asociado a distintas energías para cerrar y comenzar el año con buen pie.
Si estás buscando armonizar tu hogar, atraer prosperidad o simplemente complementar tu decoración de invierno, estas son las tonalidades que dominarán el 2025 y lo que representan.
Dorado: abundancia y buena fortuna
El dorado será uno de los tonos estrella este año. Está relacionado con la prosperidad, el éxito y la energía positiva, por lo que muchos lo eligen para centros de mesa, rincones especiales o pequeños altares de intenciones. Su versatilidad permite combinarlo con decoraciones en verde pino, blanco o rojo intenso.
Blanco: claridad y nuevos comienzos
Las velas blancas se mantienen como un clásico y en 2025 continúan siendo de las favoritas. Representan pureza, renovación y enfoque mental, ideales para encender en fechas especiales como el 31 de diciembre o en momentos de reflexión. Funcionan en cualquier estilo decorativo, desde los ambientes minimalistas hasta los más tradicionales.
Rojo: amor y protección
Este color vuelve a posicionarse entre los más buscados de la temporada. El rojo está asociado con la vitalidad, el cariño y la protección del hogar. Muchas familias optan por encender velas rojas en Nochebuena para promover la unidad, la armonía y la energía emocional durante las celebraciones.
Azul oscuro: paz interior y equilibrio energético
El azul profundo se perfila como una de las tendencias más fuertes por su toque místico y sereno. Este tono ayuda a crear espacios tranquilos, favorece la introspección y se asocia con la protección contra energías negativas. Ideal para quienes buscan ambientes equilibrados y momentos de calma en medio del ajetreo navideño.
Verde pino: renovación y estabilidad
Los tonos verdes intensos, especialmente aquellos que evocan los árboles de invierno, serán otro favorito del año. Simbolizan salud, equilibrio y crecimiento, perfectos para quienes desean cerrar el ciclo anual con serenidad. Además, aportan un aire natural y sofisticado a cualquier espacio.