Es un mito común que mantener una buena salud requiere gastar mucho dinero. Con pequeños cambios económicos podemos lograr un cuerpo sano y evitar futuras molestias, asegurando una vejez vital y feliz. ¿Buscas una forma sencilla de mejorar tu silueta y cuidar de tu salud al mismo tiempo? ¡La fibra soluble es la respuesta que has buscado! Este tipo de fibra, que se encuentra en alimentos como la avena, las frutas y las verduras, no solo te ayudará a controlar tus niveles de azúcar en la sangre, sino que también tiene impactantes beneficios para tu bienestar y salud general.
¿Qué es la fibra en la alimentación?
La fibra forma parte de los alimentos de origen vegetal y nuestro cuerpo no puede digerirla. A diferencia de otros nutrientes, como las grasas, proteínas o carbohidratos que el cuerpo descompone y absorbe, la fibra pasa relativamente intacta a través del estómago, el intestino delgado y el colon, y sale del cuerpo. Hay dos tipos principales de fibra.
1. Fibra soluble: Se disuelve en agua y forma una sustancia similar a ungel. Se encuentra en: Avena, nueces, frijoles, manzanas, arándanos.
2. Fibra insoluble: No se disuelve en agua y ayuda a mover el material a través del sistema digestivo, promoviendo la regularidad y ayudando a prevenir el estreñimiento. Se encuentra en: Trigo integral, vegetales, granos enteros.
Beneficios de la fibra en la alimentación
1.Salud digestiva
Prevención del estreñimiento: La fibra insoluble añade volumen a las heces, facilitando su movimiento a través del intestino. Previene el estreñimiento y las hemorroides. Intestino saludable: La fibra soluble llega al intestino grueso sin digerirse, ahí es fermentada por bacterias beneficiosas, produciendo ácidos grasos de cadena corta (AGCC). Nutrición de las células del colon:
Los AGCC alimentan a las células del colon, manteniéndolas fuertes y saludables.Reducción de la inflamación: Los AGCC tienen propiedades antiinflamatorias. Ayudan a reducir la inflamación del intestino y otras partes del cuerpo.
Fortalecimiento del sistema inmunológico: Un intestino sano, gracias a los AGCC, fortalece el sistema inmunológico, dado que muchas células inmunológicas residen ahí.