Un nuevo escándalo sacude al mundo del espectáculo digital: Angie Miller, modelo de OnlyFans, fue arrestada en México en relación con la investigación por el asesinato de músicos colombianos. La noticia ha dado la vuelta al continente, pues se trata de una figura que había ganado notoriedad en redes por su estilo provocador y su vida llena de excesos, proyectada constantemente a través de fotografías y transmisiones en vivo.
Según los reportes, las autoridades mexicanas vinculan a Miller con los últimos movimientos de uno de los artistas asesinados, quien habría compartido su ubicación antes de desaparecer. Este hecho levantó sospechas sobre su posible participación o conocimiento de lo ocurrido, aunque hasta el momento la investigación sigue en curso y no se ha emitido una sentencia definitiva.
El caso no solo ha puesto a Angie en el ojo del huracán, también ha abierto un debate sobre los riesgos que enfrentan los influencers y creadores de contenido que exponen su vida privada de manera pública. Para muchos, este episodio refleja cómo la fama en redes sociales puede convertirse en un arma de doble filo, donde la búsqueda de popularidad termina entrelazada con situaciones peligrosas.
Mientras el proceso legal avanza, los seguidores de la modelo se dividen entre quienes defienden su inocencia y quienes consideran que el estilo de vida que llevaba pudo haberla acercado a círculos peligrosos. Una historia que mezcla la farándula digital con la crónica roja y que seguramente seguirá generando titulares en los próximos meses.