Los Packers dieron un paso importante en su lucha por la postemporada al imponerse 31-24 a los Lions, resultado con el que completaron la barrida en sus enfrentamientos directos dentro de la NFC Norte. Jordan Love fue la figura indiscutible al lanzar cuatro pases de anotación en una tarde donde Green Bay mantuvo el control desde el inicio, capitalizando cinco de sus seis primeras series y mostrando una eficacia en cuarta oportunidad que terminó marcando la diferencia.
A pesar de que Detroit perdió muy temprano a Amon-Ra St. Brown por lesión, su ofensiva logró mantenerse cercana en producción, impulsada por una actuación explosiva de Jameson Williams, quien firmó el mejor juego de su carrera con 144 yardas y un touchdown. Sin embargo, fallos en momentos clave —incluida una cuarta oportunidad en la que Williams soltó el balón— frenaron cualquier intento de remontada. Jahmyr Gibbs también fue limitado por la defensiva rival, incapaz de generar los acarreos determinantes que suele aportar.
El cierre del duelo quedó sentenciado cuando, con menos de dos minutos en el reloj, Green Bay decidió jugársela nuevamente en cuarta oportunidad y Love encontró a Dontayvion Wicks para asegurar el primer down que permitió consumir el tiempo restante. El mariscal terminó con 234 yardas y cuatro envíos a las diagonales, acompañado por un sólido regreso de Josh Jacobs y una contribución repartida entre Wicks, Christian Watson y Romeo Doubs, quienes firmaron las anotaciones que sostuvieron la victoria visitante.