El Instituto México del Centro Woodrow Wilson llevó a cabo la ceremonia conmemorativa denominada 200 años de relaciones bilaterales: la perspectiva de los embajadores de Estados Unidos, donde se destacó la labor diplomática entre México y Estados Unidos.
Durante el evento, Luis Téllez, Senior Advisor, Head of Mexico, KKR. Co-Chair, Mexico Institute Advisory Board, subrayó que la labor de los embajadores es clave, más los contemporáneos, que tienen una tarea monumental al dirigir la relación, mantenerla y estar informado de lo que está sucediendo con la relación bilateral que ha cambiado mucho, desde antes de la presente administración, donde la relación se ha simplificado.
Agregó que el diálogo debe ser continuo y rememoró que, en las pasadas administraciones el contacto de los secretarios de estado norteamericanos con sus homólogos mexicanos, era más directo.
“La labor del embajador es un trabajo muy desafiante y es clave para promover. Acabo de mencionar al principio, la amistad es la que existe y para eso se utilizan sus conocimientos y la mayoría de los embajadores actuales son personas con encanto porque las características personales también son muy importantes para lograr entender la política bilateral”, comentó Téllez Kuenzler.
Durante la ceremonia conmemorativa de los 200 años de relaciones diplomáticas formales entre México y Estados Unidos, que se cumplirán el próximo mes de diciembre, se presentaron los libros de Dolia Estéves, “México, una tarea desafiante: los embajadores de los Estados Unidos comparten sus experiencias”, que se remonta en su publicación de 2012, también impulsada por el Wilson Center y “Embajadores de Estados Unidos en México. Diplomacia de crisis y oportunidades” de la ex embajadora de México en Estados Unidos, Roberta Lajous.
Por su parte, el ex embajador de Estados Unidos en México, John Feeley, hizo hincapié en la importancia de los dos libros y los calificó como piezas necesarias para quienes iniciarán las relaciones entre Estados Unidos y México en el futuro.
En su intervención, Kimberly Breier, asesora principal en la firma Covington y con más de 20 años de experiencia en política exterior enfocada, principalmente, en asuntos del hemisferio occidental, consideró que en la relación México-Estados Unidos se necesita ser más ambicioso que solo administrar las piezas, tener visión, averiguar a dónde se quiere llevar la relación y tener una visión más amplia para ello.
En su intervención Dolia Estéves afirmó que su libro es el resultado de entrevistas, que constituyen la pieza central, con embajadores de Estados Unidos que fueron enviados a México durante un período de 45 años, entre 1970 a 2021, y algunos ya han fallecido, desde entonces.
“El libro confirma que México no es un lugar fácil para ser embajador de Estados Unidos. Se involucran demasiados factores importantes que tienen un impacto directo en los Estados Unidos y donde las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y México, son a menudo polémicas. Casi todos los embajadores dijeron que no era que fuera una de las carreras públicas más desafiantes, si no la más desafiante, pero también la más gratificante y agradable. En última instancia, creo, y el éxito o el fracaso del embajador se mide por la eficacia con la que él o ella fue capaz de introducir más realismo en la relación representada y defendida de los Estados Unidos y ganarse la confianza del país anfitrión”, aseveró la periodista.
Roberta Lajous, ex embajadora de México en Estados Unidos y actual investigadora asociada del Colegio de México, en la presentación de su libro, afirmó que comenzó como una conversación con el Secretario de relaciones exteriores Marcelo Ebrard para estudiar la relación entre México y Estados Unidos desde un punto de vista académico y verla en una perspectiva histórica a partir del siglo 19 donde ha habido más de 60 representantes diplomáticos a lo largo de los últimos dos siglos.