El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, realizó una visita a una fábrica dedicada a la producción de nuevos lanzamisiles múltiples, donde destacó la capacidad destructiva de estos sistemas y afirmó que pueden “aniquilar al enemigo”. La información fue difundida por la agencia estatal KCNA, que presentó el recorrido como parte del fortalecimiento militar del país.
La inspección ocurrió un día después de que Pyongyang anunciara la prueba de dos misiles de crucero de largo alcance, ejercicio que el régimen calificó como una demostración de preparación para el combate. Kim sostuvo que el nuevo armamento se convertirá en el principal medio de ataque de las fuerzas armadas norcoreanas, debido a su precisión y poder de fuego.
De acuerdo con el reporte oficial, el sistema de cohetes múltiples permite ataques repentinos con alta exactitud y un impacto devastador. Imágenes difundidas por medios estatales mostraron al mandatario acompañado de altos mandos militares frente a los lanzamisiles, dentro de una planta decorada con propaganda política.
Corea del Norte mantiene un conflicto latente con Corea del Sur y considera su arsenal de artillería como pieza clave de su estrategia militar. En los últimos años, el gobierno norcoreano incrementó de manera notable las pruebas de misiles, en un contexto de creciente tensión regional y advertencias a la comunidad internacional.