El 2025 fue un año sin freno para Gloria Trevi, una de las artistas más complejas, mediáticas y resistentes del entretenimiento mexicano. Entre conciertos, entrevistas, polémicas heredadas de años pasados y un fandom que nunca la suelta, Gloria demostró que en México el espectáculo no es lineal, es metamorfosis.
Trevi se presentó en recintos importantes del país este año, manteniendo su narrativa provocadora, catártica y dramática que la ha caracterizado por décadas. Sus shows no solo convocan fans, convocan conversación: ¿es reinvención?, ¿es nostalgia?, ¿es declaración?, ¿es performance?, ¿es resistencia?, ¿es todo al mismo tiempo? Sí. Es Gloria Trevi.
Y aunque algunas polémicas siguen rondando su nombre, el espectáculo mexicano la sostiene como una figura que no necesita pedir permiso para ser trending: ella es la conversación, el personaje, la escena y el remate. Porque en México, hay estrellas que brillan, y hay estrellas que nunca se apagan porque se vuelven fuego social.
Gloria no cerró 2025, lo dramatizó, lo cantó y lo convirtió en capítulo semanal de la farándula mexicana.
