En vísperas de la festividad del 12 de diciembre, J Balvin sorprendió a fieles y peregrinos al visitar la Basílica de Guadalupe, donde fue visto caminando entre la multitud y compartió momentos de su recorrido en redes sociales. La presencia del cantante colombiano en este emblemático sitio religioso causó revuelo, pues mostró un lado personal y espiritual poco explorado de su figura pública. 
Durante su estancia, Balvin no solo recorrió el Santuario Marianosino, sino que también adquirió medallas de devoción de distintos colores como recordatorio de su visita, gesto que sus seguidores interpretaron como un acto significativo en su fe. Las imágenes y comentarios del artista rápidamente captaron la atención de internautas, reforzando el vínculo entre su carrera artística y sus raíces culturales. 
La llegada del reguetonero coincidió con una de las fechas más importantes del calendario católico mexicano, cuando miles de personas peregrinan hacia la Basílica para rendir homenaje a la Virgen de Guadalupe. La mezcla de tradición, música y fervor espiritual capturó la imaginación de muchos, destacando un momento en el que la fama se encontró con la devoción popular.
