Un descubrimiento emocionante ha tenido lugar en la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán, ubicada entre Puebla y Oaxaca, donde se han encontrado huellas de dinosaurios que datan de hace más de 120 millones de años. Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han confirmado la presencia de icnitas, o huellas fósiles, en la junta auxiliar de Santa Ana Xaloxtoc, en Tehuacán, Puebla.
Entre las huellas encontradas se encuentran las de dinosaurios herbívoros, como saurópodos de cuello largo, y carnívoros, como pequeños terópodos. También se han encontrado posibles huellas de pterosaurios, aunque se requiere más estudio para confirmarlo.
El hallazgo se debió a reportes de pobladores que observaron formaciones extrañas en ríos y barrancas. La erosión causada por las lluvias recientes permitió la exposición de estas huellas fósiles, que se encuentran dispersas en un área de 200 a 300 metros.
Este descubrimiento es significativo, ya que revela la diversidad de especies que habitaron la región durante el Cretácico Inferior. La coexistencia de diferentes grupos de dinosaurios en una misma área geográfica sugiere un ecosistema complejo y rico en vida.
