Adriana Nuricumbo Rodríguez, presidenta de la Asociación de Galleros Unidos del Estado de Chiapas, explicó el nuevo decreto que busca regular las actividades de galleras en la entidad. Según Nuricumbo, esta medida surge tras una suspensión temporal, con el objetivo de garantizar la seguridad de los galleros y asistentes, y ha sido apoyada por el gremio, que reconoce la reducción de la inseguridad en la región.
El decreto establece lineamientos claros sobre horarios de los eventos, condiciones de las instalaciones, supervisión de Protección Civil y coordinación con las autoridades para cualquier trámite o pago necesario. La primera vigencia fue de tres meses, pero actualmente la regulación abarca del 15 de noviembre al 15 de junio, permitiendo a los galleros operar bajo normas que aseguran la paz y el orden en sus actividades.
Actualmente, se registra un padrón de aproximadamente 11,000 galleros en Chiapas, aunque la cifra sigue creciendo conforme más personas se integran al sistema. Nuricumbo destacó que la actividad no solo representa una tradición cultural de generaciones, sino que también genera una importante derrama económica, beneficiando a veterinarias, laboratorios, fabricantes de jaulas y accesorios, así como a hoteles y restaurantes durante eventos de gran convocatoria como el torneo Frontera Sur.
La presidenta de este gremio, enfatizó que la gallística es una actividad milenaria que requiere cuidado especializado de los animales, incluyendo alimentación, ejercicio y manejo de líneas genéticas. Además, recalcó que la actividad se realiza con respeto hacia los animales y la sociedad, combinando tradición, economía y seguridad.