El volcán Kilauea, en la Isla Grande de Hawái, volvió a manifestar su intensa actividad este 6 de diciembre de 2025 con una erupción de enorme magnitud que rápidamente captó la atención mundial. Las imágenes que circularon en redes sociales mostraron impresionantes columnas de lava brotando con fuerza desde el cráter, convirtiéndose en tendencia en pocos minutos.
Según información de EarthSky, los chorros de lava surgieron simultáneamente desde los conductos norte y sur del volcán, alcanzando alturas superiores a los 300 metros, un fenómeno poco frecuente incluso para uno de los volcanes más activos del planeta. La violencia de la actividad fue tal que una de las cámaras de monitoreo en vivo del Servicio Geológico de Estados Unidos quedó destruida por el material incandescente.
Además, una columna de gas y partículas de vidrio volcánico se elevó hasta seis mil metros sobre el nivel del mar, creando una nube visible a kilómetros y representando riesgos para la calidad del aire y la navegación aérea.
De acuerdo con los especialistas, esta erupción forma parte de una serie de episodios que el Kilauea ha presentado a lo largo de 2025, reafirmando su estatus como uno de los volcanes más dinámicos y vigilados del mundo.