El Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes de León vivió una jornada distinta con la visita del Club Bravos de León, cuyos integrantes transformaron un día ordinario en un espacio de aprendizaje y motivación. Cuarenta jóvenes participaron en la dinámica organizada por la Secretaría de Seguridad y Paz, en coordinación con la Comisión de Deporte del Estado, donde conocieron por primera vez el mundo del béisbol y escucharon mensajes centrados en la superación personal.
Juan Ramón Noriega Tavares, encargado de la academia de los Bravos, abrió la actividad con una charla enfocada en la importancia de creer en uno mismo. Señaló que cada error brinda una nueva oportunidad y que, al igual que en el deporte, la vida permite corregir el rumbo. Su mensaje, acompañado por las experiencias de otros entrenadores y la presencia de la mascota Bravo León, buscó dejar una huella positiva en quienes atraviesan un proceso de reintegración.
Durante más de una hora, los jóvenes se involucraron en prácticas básicas de bateo, pitcheo y defensa. A pesar de su falta de experiencia, lograron asumir roles dentro del campo y mostraron entusiasmo por descubrir un deporte que abre nuevas posibilidades. Las autoridades del centro destacaron que estas actividades fortalecen la autoestima, fomentan valores y refuerzan la idea de que el esfuerzo personal puede conducir a un futuro distinto.
Al cierre de la jornada, el director general Luis Felipe Razo Ángeles agradeció la visita del club y afirmó que este tipo de encuentros resulta fundamental para apoyar la reinserción social. A su vez, Yendi Cortinas López, titular de CODE, compartió su experiencia en el deporte de alto rendimiento para recordar a los jóvenes que aún existen metas alcanzables fuera de los muros. La actividad concluyó sin un marcador final, pero con un resultado claro: el impulso de nuevas aspiraciones y la reafirmación de que cada adolescente merece una oportunidad para reconstruir su historia.