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Eva Longoria revela por qué decidió ser mamá después de los 40

Hoy en nuestro espacio de celebridades, hablamos de una etapa llena de propósito para Eva Longoria. A los 43 años, la actriz le dio la bienvenida a su primer hijo, Santiago Enrique Bastón, un momento que para ella no fue casual, sino perfectamente planeado.

Eva ha compartido en varias entrevistas que el momento fue “exacto”: después de años de trabajo arduo en su carrera como actriz, directora y productora, se sentía emocionalmente estable y era cuando más preparada estaba para abrazar la maternidad.

Dice que vivió intensamente antes de convertirse en mamá: viajó, construyó su carrera, exploró su creatividad, y eso le permitió llegar a esta nueva etapa con una plenitud que muchos solo buscan por años. “Cuarenta años de mí fue tiempo suficiente”, comentó, mostrando gratitud por haber podido vivir libremente antes de entregarse de lleno a su hijo.

Pero este salto no significó renunciar a todo lo que ha construido. Al contrario: para Eva, la maternidad ha sido una fuente poderosa de inspiración. Criar a Santiago ha despertado una sensibilidad nueva, una creatividad renovada. Él no es solo su hijo, sino también su motor diario para sus proyectos de filantropía y para su trabajo como directora.

Además, la actriz revela que su familia hoy es prioridad máxima. Por eso, cuando elige sus roles o acepta nuevos proyectos, evalúa cuidadosamente que valga la pena ausentarse, porque cada minuto lejos de su hijo debe tener un sentido real.

Un aspecto muy personal: aunque vive en el ojo público, Eva ha decidido mantener a Santiago alejado del foco mediático. Dice que respeta profundamente los tiempos y la privacidad de su hijo, y ha optado por un equilibrio para que crezca en un entorno lo más normal posible.

Hoy, a sus 50 años, Eva Longoria reflexiona con gratitud sobre su decisión de convertirse en mamá más tarde. Cree firmemente que esperar le dio no solo la madurez emocional necesaria, sino también la claridad para entender lo que realmente importa: su familia, su hijo, y la vida que quiere construir junto a ellos.

Y así, esta figura icónica de Hollywood nos recuerda que no hay un “tiempo perfecto” universal para dar un giro en la vida. Para ella, cada capítulo ha sido parte de un plan con significado, y la maternidad —en esta etapa— es, sin duda, uno de sus más bellos logros.