La superestrella del pop y actriz Ariana Grande encendió las alarmas entre sus seguidores al confirmar que dio positivo a COVID-19. La noticia llegó en un momento crucial, justo después de la intensa gira de promoción de la muy esperada película musical Wicked: For Good, en la que comparte el rol protagónico.
Ariana Grande, de 32 años, reveló la información a través de sus plataformas digitales, indicando que se encuentra con la enfermedad y que ha iniciado el protocolo de aislamiento. El anuncio generó preocupación, ya que la cantante estuvo expuesta a cientos de personas y eventos durante el reciente y maratónico tour de prensa de la segunda parte de la adaptación cinematográfica de Broadway.
El caso de Grande no es aislado. Su co-protagonista en la película, Cynthia Erivo, quien interpreta a Elphaba junto a la Glinda de Ariana, también había anunciado previamente que estaba lidiando con el virus. Esta coincidencia sugiere que el contagio pudo haber ocurrido durante los múltiples eventos y ruedas de prensa que realizaron juntas en las últimas semanas, poniendo de relieve la persistente amenaza del virus en entornos de alta interacción social.
En cuanto a su estado de salud, la intérprete de “Thank U, Next” se ha limitado a comunicar que se encuentra transitando la enfermedad. Aunque los detalles sobre la gravedad de sus síntomas son escasos, el mensaje general que transmitió a sus fans es de tranquilidad, indicando que se está cuidando y siguiendo las recomendaciones médicas de aislamiento.