Las autoridades de Indonesia confirmaron que ya son 30 las personas fallecidas tras los deslizamientos de tierra ocurridos en Java Central, una tragedia provocada por las intensas lluvias que azotaron recientemente las regiones de Cilacap y Banjarnegara. La agencia nacional de mitigación de desastres informó que las labores de rescate siguen en marcha mientras se intenta localizar a 21 personas que aún no han sido encontradas.
Banjarnegara es la zona más afectada, donde equipos de emergencia recuperaron siete cuerpos más durante el jueves. Allí se contabilizan ya diez víctimas y dieciocho personas continúan desaparecidas. Los rescatistas trabajan en condiciones sumamente complicadas: los deslizamientos formaron estanques de lodo llenos de restos de viviendas, y las corrientes de agua no dejan de fluir, lo que aumenta el peligro. Las autoridades advierten además sobre la posibilidad de nuevos derrumbes debido a las lluvias persistentes.
En total, 700 elementos —entre militares, policías y cuerpos de emergencia— participan en las operaciones, apoyados por maquinaria pesada. En cuanto a los daños, decenas de casas quedaron destruidas y al menos siete personas resultaron heridas. Más de mil 300 habitantes tuvieron que evacuar sus comunidades: cerca de 400 en Cilacap y más de 900 en Banjarnegara.
Indonesia atraviesa su temporada anual de lluvias, que se extiende de septiembre a abril. Este periodo suele incrementar drásticamente el riesgo de inundaciones y deslaves. Por ello, las autoridades ya anunciaron que las labores de búsqueda y apoyo a la población continuarán durante la próxima semana.