Una sola libélula puede devorar hasta 100 mosquitos en un solo día, moviéndose con una precisión quirúrgica y una vista tan aguda que detecta el más mínimo movimiento en pleno vuelo.
Durante la temporada de lluvias, cuando los mosquitos se multiplican, estos increíbles insectos se convierten en los guardianes silenciosos del aire, controlando naturalmente las plagas sin químicos ni trampas.
A pesar de su temible reputación, no pican ni muerden a las personas y son importantes para el ecosistema al controlar plagas de insectos como los mosquitos.
Habilidades de vuelo y caza :-
* Maniobrabilidad: Pueden volar en cualquier dirección, incluyendo hacia atrás, boca abajo y girar 360 grados, lo que les permite ser “los helicópteros del mundo de los insectos”.
* Velocidad: Son algunos de los insectos voladores más rápidos, con velocidades de hasta 72 km/h en algunas especies.
* Precisión: Su musculatura permite un control preciso, y tienen una tasa de éxito en la caza de hasta el 90%, atrapando a su presa con una precisión asombrosa.
* Visión: Sus grandes ojos compuestos tienen cerca de 30,000 facetas y les dan una visión de casi 360 grados, permitiéndoles ver a sus presas a larga distancia.
Para atraerlas a tu jardín, puedes instalar un estanque con plantas acuáticas. Indirectamente, plantar flores que atraigan a sus presas también las atraerá.
Por cierto, se dice que las libélulas traen un mensaje de transformación, adaptabilidad y renovación.
Simbolizan la sabiduría, la felicidad y la importancia de ver más allá de las apariencias.
Su presencia también se asocia con la esperanza, la luz y la capacidad de superar obstáculos.