El rugido del rock volvió a estremecer México con la llegada de Scorpions, la legendaria banda alemana que celebra 60 años de carrera con una gira mundial que ha despertado la nostalgia de varias generaciones. Con su inconfundible sonido, los creadores de himnos como Still Loving You y Wind of Change ofrecieron un espectáculo que fusionó potencia, historia y emoción pura.
En su paso por México, el público los recibió con euforia y gratitud. Desde los primeros acordes, la conexión fue inmediata: miles de voces coreando al unísono los clásicos que marcaron la historia del rock. La banda, liderada por Klaus Meine y Rudolf Schenker, demostró que el tiempo no ha pasado por ellos. Con una energía envidiable y un sonido impecable, recordaron por qué son considerados una de las agrupaciones más importantes del planeta.
Uno de los momentos más emotivos llegó cuando interpretaron Wind of Change mientras en las pantallas se proyectaban imágenes de sus primeras giras y momentos icónicos de su trayectoria. El público, con encendedores y luces de celular en alto, creó un ambiente mágico que selló la noche.
Scorpions no solo celebró seis décadas de música, sino también la permanencia del rock como lenguaje universal. Su gira no es una despedida, sino una reafirmación de que el poder del escenario sigue siendo su mayor hogar. Y México, una vez más, respondió con un rugido de admiración.