Las lluvias de los últimos días han provocado severos daños en distintas regiones del estado de Oaxaca, dejando deslaves, inundaciones y afectaciones a la red carretera. Entre los incidentes más relevantes se encuentra el deslizamiento de un talud en la autopista Barranca Larga–Ventanilla, así como inundaciones en calles de Valle Nacional tras el desbordamiento del río.
En el Istmo de Tehuantepec, el río Ostuta comenzó a desbordarse en los parajes Paso Mico y Paso Carreta, ubicados entre los municipios de San Francisco Ixhuatán y San Francisco del Mar. De igual forma, se reportó el incremento del nivel del río Las Nutrias en Santa María Guienagati y el colapso parcial de la carretera artesanal que comunica San Lucas Arroyo Palomo con San Juan Palantla.
De acuerdo con la Coordinación Estatal de Protección Civil y Gestión de Riesgos de Oaxaca (CEPCyGR), estas afectaciones derivan de la influencia indirecta de la vaguada monzónica, dentro de la cual se ubica una zona de baja presión con alto potencial de desarrollo ciclónico, lo que podría evolucionar a un ciclón tropical en los próximos días.
Ante esta situación, se prevé la continuidad del temporal lluvioso en gran parte de la entidad, con acumulaciones de entre 75 y 150 milímetros, principalmente en las regiones del Istmo, Costa y Sierra Sur. Como medida preventiva, las autoridades determinaron la suspensión de actividades académicas presenciales en algunos centros educativos de las regiones más afectadas, además del desfogue controlado de varios embalses que alcanzaron el 100% de su capacidad.
Protección Civil exhortó a la población a mantenerse atenta a los avisos meteorológicos y seguir las recomendaciones oficiales para prevenir riesgos, especialmente en zonas cercanas a ríos, laderas o carreteras propensas a deslaves.