En Huitiupán, Chiapas, una mujer identificada como Eunice Hernández López fue recluida en la cárcel rural y privada de su libertad por atreverse a defender sus tierras.
De acuerdo con la denuncia, mientras sus hijos permanecen afuera a la espera de su madre, autoridades ejidales habrían orquestado el despojo y la enviaron a prisión como castigo.
La hermana de la víctima difundió un video en el que asegura que anteriormente ya le habían arrebatado una parte de su propiedad sin consentimiento, y que en esta ocasión, al intentar nuevamente despojarla y resistirse, Eunice fue encarcelada en la cárcel ejidal.
Gracias a la intervención de Familiares y pobladores quienes exigieron la intervención inmediata de las autoridades estatales, se logró la liberación de Berenice.
Aunque autoridades locales señalan que se basaron en los usos y costumbres para justificar la detención.
En Chiapas, los usos y costumbres se refieren a los sistemas normativos y tradiciones de los pueblos indígenas, reconocidos y protegidos por la ley estatal y federal. La Ley de Derechos y Cultura Indígenas del Estado de Chiapas y la Constitución mexicana garantizan el respeto a estas prácticas, que incluyen sistemas de autogobierno y soluciones a conflictos internos, buscando salvaguardar la identidad y autonomía de las comunidades indígenas.
Esta ley protege los derechos de los pueblos indígenas, incluyendo su cultura, identidad y derecho a la libre determinación, siempre y cuando estas prácticas no contravengan la Constitución ni vulneren otros derechos humanos.