El equinoccio de otoño no solo marca un cambio de estación, sino también un cambio de energía. Es un momento de equilibrio natural: el día y la noche duran lo mismo, simbolizando armonía entre la luz y la oscuridad, entre el exterior y el interior.
Tamara Vieyte/conductora Giros Puebla/canal 13 Puebla
Esta breve igualdad nos invita a reflexionar sobre nuestro propio equilibrio personal y a prepararnos para una etapa de introspección.
A medida que la naturaleza comienza a desacelerarse, los árboles sueltan sus hojas y los días se acortan, la energía del equinoccio nos empuja a soltar lo que ya no necesitamos. Es un tiempo ideal para hacer limpieza emocional, mental y espiritual.
Al igual que la tierra se despoja, nosotros también podemos dejar ir hábitos, pensamientos o relaciones que ya no nos nutren.
Espiritualmente, este equinoccio representa una invitación al recogimiento. Después de la intensidad del verano, el otoño nos guía hacia el silencio, la contemplación y el cuidado interior.
Es un buen momento para reconectar con nuestras raíces, cerrar ciclos y sembrar intenciones que germinarán durante el invierno y florecerán en primavera.
Muchas culturas antiguas celebraban este momento con rituales de gratitud por la cosecha y de preparación para los meses más oscuros del año.
Hoy, aún podemos honrar esa energía tomándonos un momento para agradecer, meditar, escribir, hacer una caminata en la naturaleza o simplemente observar los cambios a nuestro alrededor.
El equinoccio de otoño nos recuerda que el cambio es parte esencial de la vida y que hay belleza en cada etapa del ciclo.
Nos invita a bajar el ritmo, a mirar hacia adentro y a encontrar equilibrio en medio del movimiento constante del mundo.
Te esperamos de lunes a viernes en Giros Puebla.
La cita es de 11 a 1 de la tarde por tu canal favorito, canal 13 Puebla.
Se despide tu amiga,
Tamara Vieyte.