Habitantes de los fraccionamientos Vida Mejor y Raymundo Enríquez denunciaron las condiciones críticas de la calle principal que conecta ambos sectores. La vialidad se encuentra severamente deteriorada y representa un riesgo constante tanto para peatones como para automovilistas.
Está plagada de zanjas y baches que, Julio Mérida, residente de Vida Mejor, comparó el estado del camino con uno rural abandonado.
“Ni en los ranchos se ve algo así. Parece un tramo para carretas”.
Julio Mérida / Habitante del Fraccionamiento Vida Mejor.
A la par de la calle un dren pluvial se convierte en un peligro, que, ante las lluvias se crece, dificultando el tránsito y poniendo en peligro a quienes pasan por la zona.
Hizo hincapié en el peligro que enfrenta la comunidad escolar, especialmente considerando la cercanía de la Escuela Secundaria Federal “Jaime Torres Bodet, a la que acuden estudiantes en ambos turnos.
“Dios no lo quiera, pero un niño o una niña podría caer en uno de ese dren, porque se crece y no se ve, entonces estaríamos hablando de consecuencias fatales”
Los transportistas, también resienten las malas condiciones del camino, que por esquivar los baches aumentan el riesgo de accidentes.
Son alrededor de 4 kilometros de carretera en pésimas condiciones y que conecta con diversas colonias y un banco de Bienestar; por lo que se hace indispensable que esta carretera sea reparada.
Ante esta situación crítica, los vecinos han hecho un llamado urgente al gobierno municipal para que tome cartas en el asunto y realice las reparaciones necesarias.
Aunque reconocen que una obra de pavimentación con concreto hidráulico podría implicar una inversión significativa, proponen al menos la implementación de un programa de bacheo o el uso de chapopote como una solución provisional para mitigar el riesgo que representa el camino.