La producción de café en Chiapas enfrenta una de sus peores temporadas, afectada por la escasez de mano de obra y las intensas lluvias que han azotado la región. Productores de Tapachula unos de los municipios con mayor producción, advierten que estas condiciones están deteriorando la calidad del grano y generan pérdidas económicas significativas.
“La situación es alarmante. Tenemos dos fenómenos que nos están afectando seriamente: la falta de trabajadores y las lluvias constantes. El grano se cae antes de ser recolectado y no hay suficiente personal para levantar la cosecha”.
Marco Antonio Suárez Vargas / Repte de los cafeticultores del Progreso de Chiapas.
A pesar de que la región es un punto de paso para miles de migrantes, muchos de ellos no están interesados en emplearse en labores agrícolas; además que desde hace 5 ciclo productivos mermo el ingreso de guatemaltecos jornaleros.
“Ofrecemos trabajo en el campo, pero la mayoría lo rechaza. Esto complica aún más la situación para quienes vivimos de esta actividad. Pagamos hasta 250 pesos diarios, pero aun así no logramos atraer la fuerza laboral que necesitamos”.
Se estima que entre un 30% y 40% de la cosecha podría perderse si no se atiende esta problemática a tiempo.
El productor de café, añadió que, ante este crítico panorama, los productores han hecho un llamado urgente al Instituto Nacional de Migración para que facilite el tránsito y la regularización de trabajadores guatemaltecos que están dispuestos a laborar en el campo.
“Necesitamos que se les otorguen permisos temporales para trabajar legalmente en el país. De ello depende gran parte de nuestra producción”.
Esta crisis no solo impacta a los cafeticultores, sino que también tiene repercusiones en toda la economía local. La disminución en la producción de café afecta empleos, cadenas de distribución y el comercio regional. Chiapas, que se posiciona como uno de los principales estados productores de café en México, enfrenta una amenaza directa a uno de sus pilares económicos.