La erosión en zonas como el Bosque en Centla, es un fenómeno complejo que no se explica únicamente por las intervenciones humanas como la construcción de presas o la modificación de cauces fluviales. Según explicó el director de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) en Tabasco, Luis Antonio Cabrera, la principal causa de la erosión costera en la región es el efecto de las mareas y los vientos del mar, y no la operación de las presas del río Grijalva.
Cabrera detalló que, aunque históricamente las modificaciones a los ríos han tenido cierto impacto, en la actualidad, el volumen de agua que transporta el río Grijalva —en promedio cuatro mil metros cúbicos por segundo— es mínimo en comparación con la enorme cantidad de agua y fuerza hidráulica que proviene del mar.
Añadió que, durante eventos extremos, como tormentas o frentes fríos, las olas pueden alcanzar alturas de 4 a 5 metros, lo cual impacta directamente sobre la línea costera, generando un proceso erosivo constante.
Incluso, cuando estas marejadas alcanzan su punto máximo, pueden provocar que el propio río Grijalva retroceda hasta 20 o 30 kilómetros tierra adentro, impidiéndole desembocar normalmente en el mar.