La educación financiera debe considerarse una herramienta fundamental desde la infancia, al mismo nivel que la lectura, la escritura o las matemáticas. La falta de formación en este ámbito genera hábitos de consumo desordenados y un desconocimiento sobre la importancia del ahorro y la inversión, lo cual impacta negativamente en la estabilidad económica personal y familiar.
Especialistas recomiendan que tanto en casa como en la escuela se aborden estos temas, fomentando el diálogo en familia y el desarrollo de habilidades para administrar los recursos desde edades tempranas.
Entre los conceptos clave que deben enseñarse destacan el equilibrio entre ingresos y gastos, así como el uso responsable del dinero, evitando compras impulsivas o innecesarias.
Sot.- Hildiberto Ochoa Samayoa (Titular de la CONDUSEF en Chiapas)
La enseñanza del manejo financiero responsable no solo prepara a los jóvenes para el futuro, sino que les permite disfrutar del presente sin comprometer su bienestar económico.
