El presidente Andrés Manuel López Obrador impidió que el secretario de Defensa Nacional, el general Luis Cresencio Sandoval, respondiera cuestionamientos sobre el hackeo a Sedena durante la conferencia mañanera de este miércoles 19 de octubre desde Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Casi un mes después de la filtración masiva de información de los servidores de la Sedena, hackeo confirmado por el propio López Obrador, un miembro de la prensa pidió hacer preguntas al respecto al general Sandoval pero el mandatario se negó a tratar el tema.
“Han surgido una cantidad innumerable de cables. Se habla de funcionarios locales que han tenido nexos con el crimen. La Sedena, ¿qué hacía con este tipo de información?”, cuestionó la reportera, quien agregó si la Sedena compartía la información sobre presuntos delitos a procuradores.
“Quisieran que les ayudáramos a hacer ‘el caldo gordo’ tratando el tema que fue un rotundo fracaso […] Quisieran que siguiéramos hablando de eso, no, que se apliquen y que busquen otro asunto”, afirmó AMLO.
El mandatario afirmó que “lo principal” es hablar del “acabar con la corrupción, que haya justicia. Lo otro (el hackeo a Sedena) es politequería”, y calificó como guerra sucia y calumnias al tema de la información filtrada a finales de septiembre.
“Porque la mañanera es un diálogo circular de comunicación, de muy buen nivel, no tiene que ver con la calumnia, no tiene que ver con la guerra sucia”, dijo el mandatario en la conferencia de prensa.
López Obrador también señaló que el hackeo a Sedena fue presentado como “el fin de nuestro gobierno” pero que al final había sido “un rotundo fracaso” por parte de la prensa que divulgó la información filtrada por el grupo de ciberactivistas “Guacamaya”.
“Es querer engancharme en lo que traman mis adversarios conservadores, están nada más viendo qué maldad van a hacer. De vez en cuando vamos a contestar algo así, pero no vamos a manchar la mañanera”, sentenció.