Fue la tripulación la que avisó a la guardia costera italiana que estaba haciendo agua por la popa.
Dentro se encontraban nueve personas, cuatro pasajeros y cinco tripulantes, fueron estos últimos los que avisaron a la guardia costera italiana que estaba haciendo agua por la popa.
Todos ellos tuvieron que ser rescatadas rápidamente, ya que la embarcación se hundió por completo en pocos minutos. Por suerte, no hubo que lamentar heridos.
Durante el rescate hubo complicaciones, ya que las condiciones meteorológicas eran desfavorables, lo que dificultó el acercamiento del bote al yate, pero finalmente se pudo realizar sin percances reseñables.
La guardia costera italiana ha abierto una investigación para esclarecer lo sucedido.