“Triste”, “desastroso”, “doloroso” y “critico” son algunos de los adjetivos que han utilizado familias de las comunidades La Cigüeña y Brisas del Mar en Tapachula y Suchiate, respectivamente, para describir las afectaciones a sus viviendas por inundaciones, como consecuencia del desbordamiento del río Cahoacán.
Por ahora no tienen a donde ir, pues el refugio temporal más próximo se encuentra a 40 minutos en carro en la zona urbana de Tapachula y dejar sus viviendas podría significar la pérdida de su patrimonio, en el caso de las familias de la comunidad la Cigüña.
“No tenemos a donde ir y honestamente es muy difícil dejar solas nuestras casas, porque pueden llevarse lo poco que nos quedó; como dice el dicho unos en la pena y otros en la pepena”.
Amelia Barrios / Habitante de la Colonia La Cigüeña.
Desde el aire se observa el tamaño de la afectación en las 2 las comunidades divididas por el río Cahoacan y pegadas al mar, 150 viviendas en La Cigüeña y 200 en Brisas del Mar, de acuerdo al reporte de las autoridades de protección civil.
El nivel del río desciende lentamente, y decenas de familias siguen bajo el agua y entre el lodo; por ello, piden el desazolve de la boca barra para que el agua dulce desemboque en el océano pacifico.
“Todavía hay muchas casas encharcadas, el agua escurre muy lento porque la boca barra esta azolvada; por ello, necesitamos que las autoridades de los tres niveles de gobierno manden maquinaria, retroexcavadoras para sacar el lodo y la basura”.
Lluvias intensas serán una constante en la recta final del mes de septiembre y en el mes de octubre para la región soconusco; autoridades hacen el exhortó a estar alerta y atentos ante cualquier incremento del nivel del río para evacuar y no poner en riesgo su integridad física.